Altos representantes del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) se han dado cita en Madrid en la sede de ICEX España Exportación e Inversiones para participar en una misión de intercambio de conocimiento del sector turismo y patrimonio, que ha contado con la colaboración de SEGITTUR.
La delegación del BID está compuesta por siete directivos y los ejecutivos responsables directos de los proyectos de turismo que financia el BID en distintos países de Latinoamérica. España ha creado un fondo de patrimonio en el BID por un importe de 3 millones. La visita de esta misión definirá la estrategia en la futura cartera de patrimonio del Banco.
Los directivos del BID, procedentes de diversos países de América Latina, han conocido de primera mano la experiencia española en la recuperación del patrimonio cultural e industrial; la incidencia en la competitividad del sector de las nuevas tecnologías, y las claves de la cooperación público-privada para potenciar los beneficios socioeconómicos y ambientales del turismo.
Esta jornada arranca una visita a España de varios días que llevará a la delegación de BID a conocer proyectos innovadores de turismo en Jaén, Granada o Segovia entre otras provincias.
Durante su intervención en esta sesión de trabajo inicial, la consejera delegada de ICEX, María Peña, ha destacado “el papel del Banco Interamericano de Desarrollo como pionero en la identificación del potencial turístico como vector de desarrollo sostenible e inclusivo”. Asimismo, ha añadido que el sector debe responder a los grandes retos a los que se enfrenta con la incorporación de intangibles, como marca, reputación o satisfacción de cliente; la digitalización, y los llamados destinos turísticos inteligentes; y apostando por la gestión sostenible de nuestros recursos.
Durante la jornada han participado responsables de la Secretaría de Estado de Turismo, de SEGITTUR y de la Federación de Municipios y Provincias, entre otros, y empresas como Telefónica, Civitatis, Iberia y el ITH, que ha analizado a lo largo de tres paneles los retos del sector como la conservación del patrimonio y la innovación, la disrupción de las nuevas tecnologías y su efecto sobre la competitividad turística y las claves para la coordinación público-privada y los modelos de financiación.
